jueves, 1 de julio de 2010

Leonardo Garnier: Los costarricenses "somos una síntesis de lo diverso"


  • Entrevistamos al Ministro de Educación sobre temas de lectura, libros, cambios educativos y muchos otros temas.
  • "El que no cambia nada es el que quiere cambiarlo todo".
Geovanny Jiménez S. , CulturaCR, 1 de julio 2010.

¿Algún parecido?

Don Leonardo Garnier es un caballero entusiasta, accesible a la simpatía y la comunicación clara, profesor y aprendiz de todos los días, con ilusiones reales, diplomático pero sencillo, una combinación interesante que solo se entiende para un economista cuyos temas de interés son más de índole filosóficos y sociales.

Con él hubiera conversado toda una tarde sin agotarme, creo que tampoco él, pero recordemos que es el Ministro de Educación, por segundo período consecutivo, así que tratamos de estirar lo más posible el tiempo y lo interrogé sobre varios temas de amplio interés actual y atemporal.


Esta entrevista usted la puede disfrutar por dos medios, una parte en video y la otra textual. Empecemos por lo más divertido, la lectura. Al final podrá ver el video donde el señor Ministro se refiere al tema de la lectura, las listas del MEP, Mamita Yunái y el "Quijote".En su despacho, la "giganta (máscara gigante de su figura)" que le hicieron en Barva a un lago, cientos de libros, su tradicional camisa celeste con saco azul, Sus manos en permanente acomodo de su también tradicional "melena canosa" y un amplio espacio acorde para su amplia disposición, completaron el cuadro ideal para preguntar y conversar.

Lenguaje y literatura en la retina de Leonardo Garnier

¿Conocía usted que entre los muchachos de ahora hay una expresión, "a cachete", que significa algo así como "entregarse por entero", le parece idiosincrática o quizás tosca?

A mí el lenguaje me gusta, esa distinción entre buenas y malas palabras y demás no, pienso que hay palabra bien y mal usadas. Esta no la había oído antes y no le conozco el contexto, pero me suena como "a todo pulmón", estas cosas no me suenan vulgares; torta si las usan mal, por ejemplo cuando alguien usa palabras con un sentido distinto al que tienen.

Está por publicar un libro nuevo con Uruk editores...

Es como de la evolución de Costa Rica del 80 al 2005, una especie de ensayo con mucho gráfico, pero en realidad el tema del libro es pelearse con dos caricaturas que nos tienen atrapados: la de la gente que cree que todo es una maravilla, que el país está muy bien y, por otra parte, la de la gente que cree que todo este país es una porquería, que nada sirve y que nunca será mejor que antes; eso es lo que intentamos plantear Laura Cristina Blanco y yo. Decimos que la realidad es más compleja que eso y a veces nos peleamos a muerte por esas dos caricaturas y no, es mucho más que eso.

Esperaremos la obra entonces. Don Leonardo, un libro que lo haya impresionado...

"Memorias de Adriano", a mí me impactó mucho. En cada etapa de la vida hay un libro; Julio Cortázar en la etapa de universidad, me cuesta pensar que haya un cuentista que me guste más que Cortázar, me gustaba lo corto de él, cosas como "La vuelta al día en 80 mundos", y también sus novelas como Rayuela.

Costarricenses...

Joaquín Gutiérrez es el que me parece más completo, sus narraciones, sus traducciones y ensayos. Gutiérrez logró un manejo narrativo difícilmente superado en lo que he leído.

¿Carlos Salazar Herrera?

Eso es de lo más impresionante, lo cuentos de Carlos Salazar Herrera son totalmente fuera de serie, me impresiona que no sea más conocido fuera de Costa Rica. La precisión, la sorpresa y el final de sus cuentos...

¿Adelantado?

Muy moderno, claro.

¿Poetas costarricenses?

(Piensa y duda ligeramente) Estamos marcados por Debravo, verdad, es imposible decir otra cosa...No sé si es un pero, el pero no es Debravo, es que me parece una lástima que nos hemos pegado en Debravo; hay otras cosas, por ejemplo a mí me encanta Carmen Naranjo, me gusta mucho la poesía de Ana Istarú, Zonta tiene cosas que me gustan. Y así hay otros poetas con propuestas valiosas en la actualidad que deben ser más divulgadas.

A propósito de un solo libro (como Salazar Herrera) ¿"Alas en fuga" de Marchena?

"Vuelo supremo" de Marchena, más precisamente, es genial, como cuando lees un poema de Neruda, es que es un poema muy bien logrado.

El Ministro y su visión para este nuevo período

Volvamos al Ministerio de Educación, la relación entre cultura y educación, se ha hablado de duplicidad de funciones entre los ministerios, que no hay una delimitación clara, ¿qué piensa usted sobre eso?

Igual que en salud, casi con cualquier ministerio, la separación en sectores y ministerios es claramente artificial, es una forma de trabajar solamente. Diay, educación tiene que ver con todo, seguridad vial tiene que ver con educación, por ejemplo. Educación es suficientemente grande como para pretender meterle las labores de cultura. En otros países se subordina cultura a la lógica aplastante de la educación, pero no, yo prefiero que se mantenga aparte, pequeño y fresco.

Dos períodos como Ministro, más dos meses de este segundo período, qué falta por consolidar en este segundo período?

Estamos apenas empezando. Yo he tratado, en efecto, de sentir y vivir esto como un solo período y también como dos períodos diferentes. Lo que no quiero es que se sienta como una continuación del período anterior, es decir, más tiempo para hacer lo que estábamos haciendo o quedó pendiente, no no, este es más tiempo para hacer más cosas. Si me preguntás qué es lo más importante en Educación creo que es el tema central de la identidad, tratar de ayudar alos chiquillos a construir su identidad.

Manuel Obregón trabaja desde la misma base de la identidad...

Trabajo muy de cerca con Manuel.

¿Cómo aterrizamos el tema de la identidad?

Estoy claro que hay que aterrizarlo. Pero antes debemos tener claro cuál es el sentido más profundo de lo que trabajás, el hilo conductor que te guía en lo que trabajás.

Eso quería preguntarle, ¿qué es claramente lo que Leonardo Garnier quiere lograr en Educación?

Lo tenemos bastante claro, lo primero es ese sentido de la educación como formadora de personas con una identidad clara de quiénes son, cuál es su historia, cómo forman parte del mundo.

En los jóvenes particularmente tenemos esas caricaturas partidas, por ejemplo, si usted es de Alajuela entonces su identidad es de alajuelense, entonces no, suave, suave, su identidad es de alajuelense, pero de repente es saprissista, de pronto tiene amigos en Nicaragua, le gusta la música de un autor eslovako, o sea, nuestras identidades "son una síntesis de lo diverso". A mí me encanta aquella frase de Marx que dice "somos una unidad de lo diverso", "la síntesis de múltiples determinaciones" (sonríe) . Para mí ese es el tema central, detrás de ese tema uno va desagregando temas específicos. Por ejemplo, algo que siempre quise hacer es el tema del impulso a la educación artística, lo pensaba a los 10 o 12 años antes de estar en el Ministerio, bueno, ahora estoy aquí y puedo tratar de influenciarme a mí mismo para lograrlo (sonríe plácidamente de nuevo). Yo siempre comentaba y comenté con varios ministros y ministras de educación que por qué no aprovechábamos el MEP que tiene un millón de estudiantes para generar ese gusto por el arte; porque incluso viéndolo como economista el arte tiene esa característica de que no se gasta cuando se consume, entonces el costo marginal de consumir el arte es cero, podés mejorar el bienestar de la gente enormemente casi sin costo y generar un modus vivendi a los artistas que falta les hace. Me parece una cosa sublime, tiene sentido en sí mismo, entonces yo hablaba con los ministros de por qué no hacer educación artística así y nadie me daba pelota, ahora yo me digo: "Bueno, ahora yo puedo darme pelota" (vuelven las sonrisas). A eso le hemos dado mucha pelota, al programa de "Ética, estética y ciudadanía", ha sido lindo, los nuevos programas de música y artes plásticas me gustan mucho.

¿Cree ud que "Lectura" debe ser una materia en sí misma?

El problema que tienen música y artes plásticas es que son asignaturas, pero la mitad de los estudiantes no la reciben o son consideradas secundarias. Lo mismo podría pasar con "Lectura"...

Entonces se requiere una reforma curricular...

Yo creo que se debe hacer. De hecho, ya empezamos con música y artes plásticas, y hay que ir avanzando. En esta segunda ronda, así como lo hicimos en Artes, Música y Cívica, yo quiero tocar dos asignaturas más: Español y Matemática. Ambas tiene que ver mucho con la forma de pensar, de articular los procesos mentales. El Español, por ejemplo, tiene la parte gramatical, pero además tiene la otra parte de la literatura que es totalmente artística. Se pueden hacer cosas importantes en esas materias y en eso estamos.

Usted prefiere los cambios parciales y sustanciasos antes que las reformas radicales, ¿es posible pensar en una reforma educativa?

El asunto es cómo se hacen los cambios. Uno pasó por todas las épocas aquellas en que se quería cambiar el mundo y hacer la revolución, siempre recuerdo aquella canción que decía "el que no cambia todo, no cambia nada". Sin embargo, después de los años, de muchas lecturas y un montón de experiencias uno termina por convencerse de que, posiblemente, el que quiere cambiarlo todo es el que no cambia nada.

Un autor que a mí me marcó mucho fue Albert Hichmann. En los años 50 hubo un gran debate sobre las teorías del desarrollo y subdesarrollo, muchos autores planteaban un desarrollo balanceado (construir todo a la vez y bien relacionado una cosa con otra la mismo tiempo); pero Hichmann defendía el desarrollo desbalanceado, desequilibrado, diciendo: "si un país subdesarrollado pudiera hacer todo a la vez ya sería desarrollado". Suena lindísimo, pero es pura paja. Él lo que dice es que uno tiene que ver cuál es la capacidad que tiene una sociedad para tomar las decisiones que generen algunos cambios y que esos cambios provoquen un desequilibrio que va a generar otros cambios, a reunir la masa crítica para que hayan agentes que provoquen los otros cambios y contextos, que a su vez atraigan los otros cambios. Y me parece enormemente sensato, uno nunca tiene ni el capital político, ni toda la gente, ni todos los recursos, ni el tiempo, ni la energía, para hacer todo a la vez. Entonces la idea es escoger, por ejemplo, si uno dice yo voy a estar 4 años en el MEP, ¿cuáles cambios yo creo que podemos hacer en el contexto, con los recursos, con lo que sabemos, y que esos cambios no sean una única cosa sino que a su vez me provoquen un desequilibro. Un ejemplo: cambiamos los programas de Cívica y yo creo que muy bien, me gusta mucho el nuevo programa, es mucho más creativo en contenido y en la metodología educativa. Los docentes que dan Cívica son muchos de ellos también docentes de Estudios Sociales, así logramos que en la medida en que esa reforma en Cívica funcione, también tendrá efectos en Estudios Sociales y ya los está teniendo.

El cambio en las normas de repitencia, otro ejemplo, que es un cambio que no habíamos considerado y se dio por una consulta de un estudiante. Ese cambio va a provocar una transformación en la secundaria que es difícil de imaginar. Eso de que ya secundaria no es por niveles fijos en bloques, sino que se van pasando en dos o en tres niveles, son cosas que asustan mucho a los docentes, sí claro, porque hay estudiantes en los pasillos, entonces un adolescente desocupado es visto como un peligro... En consecuencia, el colegio se empieza a convertir en otras cosa y tenemos un reto administrativo que es utilizar bien eso, pero tenemos un reto lindísimo, es decir, yo tengo que entender que el proceso educativo no es el que se da en la asignatura, en el aula, sino el que se da en el colegio todo el tiempo, porque los estudiantes están ahí. Entonces eso te abre puertas para otros cambios, de pronto uno podría convertir diversificada (cuarto y quinto nivel de secundaria) en algo más parecido a las universidades, o te sugiere cosas aún más amplias para poder hacer.

Los cambios que yo impulso si me gusta que tengan el tema de la identidad, pero en una organización tan grande como el Ministerio hay cambios que se generan por sí solos y no es posible controlarlos todos, ni se pretende. La otra cara del tema de identidad es también para refrescar al Ministerio que es un poco tieso, rígido y conservador, o eliminar un poco el miedo como elemento de gestión educativa. Aquí El estudiante le tiene miedo al profesor, el profesor al director, el director al supervisor...un sistema montado sobre un esquema de temores.

Pero a don Leonardo Garnier no le tienen miedo...

(Se le enternece la mirada) Eso es muy bonito, yo siento que no me tienen miedo y eso me gusta. El miedo saca lo peor del ser humano.

En unos días le estaremos presentando la segunda parte de esta entrevista, que fue realizada en video y trata sobre el tema de las lecturas, los libros de las listas de lectura, el "Quijote" y "Mamita Yunái".

1 comentario:

  1. Una excelente entrevista de nuestro amigo Geovanny. Espero lo disfruten...

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